Varios factores afectan la fluctuación constante del precio del oro. Vender oro es una operación siempre fructuosa, aunque la cotización de la onza de oro pueda variar más o menos sensiblemente con mucha frecuencia. En primer lugar hay que considerar la tasa de interés, cuyo aumento suele causar la bajada del precio del oro.  En éste caso los inversores tienden a adquirir más bonos del estado u otros títulos dependientes de la tasa de interés, y menos lingotes de oro u acciones como las de Royal Gold Inc. o de Kinross Gold Corp., es decir inversiones financieras directamente relacionadas a la producción y a la adquisición del oro.

 

Otro factor importante en las variaciones del precio del oro es la situación política internacional. Los conflictos, las tensiones y en general al inestabilidad de la relaciones entre diferentes países se traduce en el aumento del precio del oro. La inversión en el oro es universalmente sinónimo de seguridad, ya que en términos absolutos el oro no pierde valor con el pasar de los años. Frente a la sensación de inseguridad o frente a la precariedad que manifiestan los mercados en tiempos de crisis, la compraventa del oro se confirma una transacción rentable, ya que el valor del oro se mantiene estable y el precio de la onza de oro suele aumentar.

 

Al momento de vender oro, la cotización de la onza de oro así como el precio del oro al gramo, dependen también del mercado de las divisas y del aumento de la inflación. Cuando el dinero pierde valor, aumenta la demanda de oro, lo cual determina un incremento de la producción y del precio del oro.